Establecer unidad dedicada a pérdidas dentro de la empresa de servicios públicos. La mayoría de los programas van acompañados de una actividad para fortalecer la capacidad organizativa de la empresa, ayudando a estructurar una unidad responsable de las pérdidas y proporcionando las habilidades y competencias necesarias. La composición de la unidad debe ser multidisciplinaria y debe tener la autonomía otorgada por la alta dirección con los arreglos de gobernanza adecuados. La unidad proporcionará monitoreo e informes periódicos del programa de pérdida de energía contra métricas clave. En algunos países, las mejores prácticas también han identificado el beneficio de tener equipos dedicados a las pérdidas en el regulador y los ministerios.

Establecer una línea de base y una cuantificación de las pérdidas como parte de un diagnóstico a seguir por un estudio específico. Las empresas de servicios públicos deben desarrollar una línea de base que distinga y calcule las pérdidas técnicas y no técnicas y su evolución a lo largo del tiempo con una definición de "tal cual": la situación actual y el punto de partida. La cuantificación se expresaría en términos técnicos y monetarios. Debido a los impactos de la estacionalidad, la línea de base debe basarse en un mínimo de un año completo y una posible información de dos años. Idealmente, este estudio debería ser realizado por firmas especializadas e independientes con el apoyo del equipo operativo de la empresa. Las secciones de referencia y anexos presentan información sobre las diferentes metodologías que una empresa de servicios públicos puede utilizar para estimar sus pérdidas.

Luego de establecer la línea de base, la empresa de servicios públicos debe desarrollar un estudio detallado con una hoja de ruta que establezca y priorice las actividades necesarias para la reducción de pérdidas técnicas y no técnicas. El estudio en sí debe establecer un plan de acción a corto y largo plazo con las inversiones necesarias, el origen de las pérdidas (tipos de consumidores y ubicación geográfica si es posible, con el Sistema de Información Geográfica (SIG), la base de datos del sistema comercial, las herramientas a ser utilizado (hardware y software), los objetivos por período y un equipo responsable y dedicado. Estas actividades se describen a continuación con más detalle

Tenga en cuenta los aspectos regulatorios. Las empresas de servicios públicos pueden involucrar a la autoridad reguladora para garantizar que existan los mecanismos de incentivos adecuados para desbloquear las reducciones en las pérdidas. Esto incluye la discusión con los reguladores para identificar impactos en el cálculo de las tarifas eléctricas de tal manera que permitan la asequibilidad a la población más vulnerable. Además, es importante revisar si los códigos de suministro o de red están incentivando la reducción de pérdidas.

Además, y en colaboración con el regulador, la empresa debe considerar la compatibilidad de los incentivos, ya que estos han sido factores determinantes para la reducción de pérdidas8. Estos incluyen: (i) establecer un límite de tasa de pérdida. A la tarifa se le puede atribuir un valor límite de pérdida no técnica, ya que la empresa no podrá absorber toda la pérdida económica, pero tendrá incentivos para reducirla (límite decreciente); (ii) definir el límite de pérdidas: determinar los niveles regulatorios de pérdidas no técnicas a través de un análisis comparativo, que considera el nivel de complejidad económica y social de la región; y (iii) facilitar la regularización técnica: en consumidores de bajos ingresos con fraude, permitir regular técnicamente esta situación mediante el suministro de un kit estándar, cuyo costo podría financiarse en cuotas a ser cobradas en futuras facturas de energía.